Fue una opción adecuada para un viaje relámpago en Bajo Boquete con una buena relación calidad-precio. El desayuno fue muy bueno, lleno de frutas frescas y opciones que me dieron energía para el día. Recomiendo pedir habitaciones que no den a la carretera, ya que el ruido puede ser un problema.

El desayuno fue una experiencia encantadora, con

frutas frescas y opciones personalizadas. La habitación era acogedora, aunque un poco pequeña, y el baño tenía buen espacio. La ubicación es ideal, a solo minutos del pueblo, pero un poco de ruido en las noches por la carretera.

La habitación con vista a las montañas ofrece un paisaje impresionante que realmente se disfruta. Wifi estaba disponible durante todo el día, perfecta para mantenerse conectado.

La habitación era bastante pequeña, lo que podría resultar incómodo para estancias prolongadas. Además, el ruido de los autos en la calle puede ser un inconveniente, especialmente para quienes buscan tranquilidad. La presión y temperatura del agua en la ducha a veces resultaban difíciles de ajustar, lo que podría frustrar a algunos huéspedes.

Una reseña práctica y directa

Hotel acogedor con excelente atención. Las habitaciones son cómodas y limpias, con buena señal de wifi. El desayuno es delicioso, preparado al momento. Sin embargo, el personal podría mejorar en la atención proactiva hacia los huéspedes. La ubicación es ideal, a pocos minutos del pueblo, lo que facilita el acceso a restaurantes y actividades.

La habitación que tuve era bastante amplia y cómoda, pero el baño era chiquitito, casi no podía moverse, lo que era un poco incómodo. La cama era relajante, aunque me pareció enorme para el espacio disponible. Además, aunque el wifi funcionaba bien, le faltaban algunos accesorios como toallas para el piso. Por otro lado, la vista a las montañas fue espectacular.

Desayuno incluido, muy sabroso.

La Casa de la Abuela ofrece un desayuno variado y delicioso, con frutas frescas que alegraron mis mañanas. Las habitaciones son acogedoras y tienen buen wifi, lo cual fue excelente para mis necesidades de trabajo. La atención del personal fue notable, siempre dispuestos a ayudar en lo que fuera necesario. Además, la decoración del lugar tiene un toque auténtico que se siente cálido y agradable.

El baño era muy pequeño.

Cada mañana, desayuné frutas frescas que hicieron sentir mis papilas gustativas como si estuvieran en una fiesta tropical. Además, la habitación con vista a las montañas era como un cuadro viviente, donde cada amanecer era una nueva obra maestra de la naturaleza.

Ruidos molestos

El lugar es acogedor y tiene una buena ubicación, ideal para caminar al pueblo. Las habitaciones son limpias y cuentan con buen wifi. Sin embargo, el ruido de los autos puede ser un inconveniente, y ajustar la temperatura del agua en la ducha a veces es complicado. Aún así, es una buena opción para estancias cortas.

Qué descubierta! Las carnes a la parrilla en Butcher Chophouse fueron espectaculares, un manjar que no te puedes perder. La atención en La Casa de la Abuela también fue notable, siempre listos para ayudar. Además, el desayuno incluyó frutas frescas y varias opciones que me alegraron las mañanas.

Nos tocó una habitación sin ventana por tres noches, lo cual fue un poco incómodo. Además, el ruido de los camiones en la calle era fastidioso, especialmente porque las puertas son livianas y se escucha todo. En comparación con otros hospedajes, el precio durante el fin de semana de carnaval me pareció un poco elevado a lo que ofrecen.

Ubicación perfecta y vistas maravillosas. Las habitaciones son limpias y tienen ese encanto familiar que hace que te sientas como en casa.

El baño era tan pequeño que una acrobacia era esencial para moverme, ¡como en un circo!

La habitación era cómoda, aunque con ruidos molestos de autos.

La atención al detalle en el desayuno fue increíble, probé unas frutas frescas que me dejaron encantado. Además, el café era de verdad exquisito. Definitivamente regresaría.